Después de mucho tiempo, vuelvo a darte la bienvenida al blog en el que aprenderás inglés y, si te descuidas, hasta español. Han sido varios los motivos que me han hecho descuidar el blog en cuanto a actualizaciones. Te podría decir que vuelvo definitivamente, pero va a ser que no. Intentaré publicar lo más a menudo posible, eso sí.
Hoy voy a dejaros otro post de modismos, en este caso 10 idioms de los sentidos. Me refiero a los cinco sentidos de toda la vida: vista, oído, olfato, gusto y tacto. No incluyo ni la clarividencia ni la telepatía cósmica, porque entiendo que, como la mayoría de mis lectores, no eres un ciudadano de Raticulín.
10 idioms relacionados con los sentidos
Vista
A sight for sore eyes
La primera mención de este idiom por escrito la hizo el autor Jonathan Swift en 1738 (the sight of you is good for sore eyes), en su libro A Complete Collection of Genteel and Ingenious Conversation. Sin embargo, se cree que la expresión llevaba ya tiempo usándose de forma oral. La version abreviada que se emplea hoy en día la acuño William Hazlitt en 1826, en la New Monthly Magazine.
En español se puede traducir como “un regalo para la vista”; o, en el contexto adecuado, como la exclamación “¡dichosos los ojos!”, que se suele utilizar cuando te encuentras con alguien a quien no ves desde hace mucho tiempo.
See eye to eye
Este otro idiom relacionado con la vista nos rompe un poco los esquemas temporales. Tanto que tenemos que remontarnos a la Biblia para encontrarlo por primera vez en forma escrita. Vale, si nos ponemos puntillosos, se trataría de la versión del Rey Jacobo (King James Bible), publicada en 1611… Pero vamos, que estamos ante un idiom con más años que un bosque.
Concretamente, este idiom lo encontramos en Isaías 52:8. En la traducción al inglés de esta King James Version (como la llaman en EE.UU.) o Authorised Version (como dicen en Reino Unido), se puede leer:
The voice of your watchmen—they lift up their voice; together they sing for joy; for eye to eye they see the return of the Lord to Zion.
La idea es la de ver las cosas a la misma altura, al mismo nivel («ojo a ojo»). El significado actual de este idiom de los sentidos es “estar de acuerdo” o “ponerse de acuerdo”.
Oído
As sound as a bell
Pasamos a un par de idioms relacionados con el sentido del oído. El primero de ellos es, en realidad, algo engañoso: este sound que vemos arriba no se refiere al sonido. La voz inglesa sound, como ocurre con muchas otras palabras, tiene varias etimologías. La más habitual es la que remite al latín sonus, con el significado de “sonido”. Sin embargo, en este caso el origen se remonta a la palabra del Old English, gesund, que significaba algo así como “en pleno uso de sus facultades físicas y mentales”. Es decir, sano. Y cuerdo, que no es poco.
Y a esto se refiere el idiom, que en español podemos traducir como “sano como una manzana” o “como una pera”, por eso de que las frutas son muy saludables. También puede utilizarse para referirse a objetos, indicando que algo está en perfecto estado. El uso de bell en la analogía inglesa se debe al juego de palabras que forma la “campana” con el primer significado de sound, el del sonido.
Su primera aparición escrita se debe al autor Thomas Newton, quien lo utilizó en su traducción del libro Touchstone of Complexions, allá por1565:
They be people commonly healthy, and as sound as a bell.
Be all ears
No es tan habitual que un idiom se pueda traducir de forma casi literal del inglés al español, pero en este caso, estamos de suerte. I am all ears sería el clásico “soy todo oídos”, que se utiliza cuando quieres dar a entender que estás prestando total atención a lo que se te dice (vale, ear significa «oreja», pero no me seas aguafiestas, tú).
Se dice que este idiom de los sentidos apareció por primera vez en forma escrita en el siglo XVIII, pero John Milton ya lo utilizó, de aquellas maneras, en su obra Comus de 1637.
I was all ear And took in strains that might create a soul Under the ribs of Death
Como es habitual en la mayoría de los modismos, es difícil saber con exactitud cuándo empezó a utilizarse realmente.
Olfato
Smell a rat / Smell fishy
Cuando “hueles una rata”, o “hueles a pescado”, lo que estás dando a entender en inglés es que algo te parece sospechoso. Que no es de fiar, vamos; que “te huele mal”. Ya sabes, como cuando esa tía que está buenísima no sólo te hace match en Tinder, sino que te empieza a hablar ella. Lo normal es que te des cuenta de que algo no te cuadra cuando empieza a darte consejos de cómo invertir en criptomonedas; y es que, frecuentemente, al otro lado del teclado no está ese clon de Pamela Anderson en sus mejores años, sino el bigotudo Sanjay, de Bangladesh.
Anyway, que el idiom de los sentidos smell a rat se remonta a 1540, cuando apareció por primera vez en el poema anónimo (aunque atribuido a John Skelton) The Image of Ipocrysy. En este poema, mediante la metáfora de un gato que es capaz de detectar la presencia de una rata por el olfato, se hablaba de cómo el clero era capaz de detectar a aquellos de los que sospechaban podían ser “pecadores”.
En el caso de smell fishy, se cree que se originó a principios del siglo XIX, aunque probablemente se viniera utilizando desde mucho antes. Y es que, en este caso, su uso para indicar que algo no es lo que parece resulta bastante obvio: si un pescado huele mal es que no está fresco, aunque el pescatero pretenda hacerte creer lo contrario.
Smell / stink to high heaven
Nuestro segundo idiom relacionado con el sentido del olfato es más literal, y nos habla de algo que huele tan mal que llega hasta el cielo. De hecho, hay que mencionar que, aunque podemos encontrar este modismo con cualquiera de los dos verbos que he puesto arriba, lo habitual es que aparezca con stink. Stink tiene un matiz mucho más fuerte que smell, y se traduciría por “apestar”.
Se cree que su primera aparición por escrito se debe nada menos que a Shakespeare, quien lo utilizó en Hamlet (con el verbo smell en este caso), en 1601, para referirse al asesinato de un hermano:
O, my offense is rank! It smells to heaven.
Gusto
A taste of one’s own medicine
Una buena adaptación de este idiom de los sentidos sería “pagar a alguien con la misma moneda”. Se utiliza para indicar que es lícito que alguien que ha obrado mal reciba un trato igualmente malo. En español es también habitual ver traducciones más literales, como “dar a alguien una dosis de su propia medicina”.
Su origen lo encontramos en una fábula de Esopo en la que un zapatero, incapaz de ganarse la vida en su oficio, se hace pasar por médico. Así, prospera vendiendo una poción que, según él, es un antídoto contra cualquier veneno, un verdadero curalotodo (como ese famoso snake oil del que ya hablé en su día). Hasta que un día cae gravemente enfermo y el Gobernador de la ciudad le insta a beber esa misma pócima para recuperarse.
En la fábula de Esopo no se menciona el idiom de forma específica, sino la idea subyacente. El uso del modismo tal y como lo conocemos hoy en día aparece en medios escritos por primera vez a principios del siglo XIX.
Champagne taste on a beer budget
A finales del siglo XIX, el champán se consideraba una bebida de gran lujo, un símbolo de estatus y riqueza; y sólo aquellas personas adineradas podían permitírselo. La cerveza, por su parte, siempre ha estado ligada a un estilo de vida más económico (aunque, hoy en día, con los precios de algunas IPAs y Stouts, nadie lo diría). Por ello, este idiom se aplica a alguien que quiere “beber champán con un presupuesto de cerveza”, es decir, que vive por encima de sus posibilidades.
Su primera aparición por escrito se dio en un artículo de Howard Fielding y Frederick Barton, publicado en 1890 en el periódico The Globe-Republican con el título ‘The Victim of his Clothes’:
School mastering I found, did not pay for a man who had acquired champagne taste on a beer budget…
Tacto
Not touch (someone or something) with a ten-foot pole
Pasamos al sentido del tacto con este divertido idiom que, inmediatamente, nos hace recordar esas noches de juventud en las que íbamos por los garitos intentando pillar cacho. Aunque Youtube popularizó la expresión “contigo no, bicho”, lo cierto es que lo más habitual era que nos dijeran “no te tocaría ni con un palo”.
Esta sería la adaptación más evidente de este modismo, que se originó a mediados del siglo XVIII para reemplazar a un idiom similar, not to be handled with a pair of tongs. El “palo de 10 pies” sustituía a las pinzas (tongs) en una frase que tiene dos versiones: La que encabeza la sección, que se utiliza predominantemente en Estados Unidos; y I wouldn’t touch you with a barge pole, usada sobre todo en Reino Unido.
Entonces, ¿cuál es la diferencia entre un barge pole y un 10-foot pole? Ninguna, en realidad. Un barge pole es esto:
Ese palo que se utiliza para remar y/o maniobrar ese tipo de embarcaciones, similares a una góndola: eso es un barge pole. Y da la casualidad de que mide, precisamente, 10 pies (poco más de tres metros).
En cualquier caso, estos palos de 3 metros se utilizaban como herramienta habitual en otros ámbitos, como los trabajos de granja o enterramientos, debido a su medida estándar.
Lose one’s touch
Terminamos con el segundo idiom de los sentidos relacionado con el tacto. Si “pierdes el toque” significa que has perdido facultades, que ya no eres capaz de hacer algo con la misma destreza que antaño.
El primer uso registrado de touch con este sentido de “habilidad” es relativamente reciente, de 1927. Se utilizaba en referencia a la destreza en la música (con un instrumento) y en las artes, como podría ser el caso de un pintor hábil con sus pinceles.
Hay muchos más idioms de los sentidos, obviamente. Pero aquí he querido dejar reflejados solo una pequeña muestra. Si tienes algún idiom relacionado con los cinco sentidos que te hace especial gracia, puedes dejárnoslo en los comentarios, en nuestro Facebook, Twitter, o en nuestro perfil de Bloguers, e intentaremos analizarlo en un futuro post. Peace and love!
Qué bueno leerlo nuevamente! En cuanto vi el correo notificando su nuevo post me alegré mucho. Como siempre genial, me ha encantado. Muchas gracias
Me alegra mucho leer esto, Iris. Muchas gracias, espero poder seguir publicando con algo más de asiduidad. Pero comentarios así levantan el ánimo, sin duda.
Estos idioms son muy interesantes y su historia más aún, y eso que son sólo los relacionados con la vista. Gracias por compartir.
Gracias, Rosana. Siempre he sido muy aficionado a los idioms, de ahí que tenga varios posts relacionados. Si en algún momento saco tiempo para retomar el blog, no dudes de que volveré a sacar posts de idioms. Gracias por comentar 🙂
Que interesantes estos idioms. La verdad es que ni los conocía pero no cabe duda que ayudan mucho para ampliar el vocabulario y darle un poco mas de color al inglés. Gracias por el post!
Muchas gracias, Luis. Me alegro de que te haya gustado y hayas podido adquirir algunos idioms nuevos para tu repertorio 🙂