Para la entrada de hoy he decidido salirme un poco de lo habitual (algo que será cada vez más habitual, recordad que, en principio, ya he “terminado” lo que vendría a ser un temario estándar de gramática) y entrar de nuevo en aspectos de cultura británica, en este caso en lo que respecta a la gastronomía (sí, se pueden poner las palabras “gastronomía” y “británica” en una misma frase, no os creáis todos los mitos que corren por ahí).
El caso es que el otro día recordé lo habitual que es en UK tener en sus menús, como primer plato, una sempiterna Soup of the day (“Sopa del día”). De entre ellas, la más británica y reconocible de todas es, sin duda, la tomato soup (sopa de tomate). Recordé haber tomado una en el Castillo de Cawdor en Escocia y, de repente, me entraron ganas de hacer una, así que busqué en internet y me decanté por esta receta del popular chef Jamie Oliver, tomato soup with basil (sopa de tomate con albahaca), cuya versión made in Yentelman (y en Spanish) paso a describir a continuación.
Para empezar, los ingredientes. En la original pone de 6 a 8 comensales, pero en mi caso comimos 10… y aún sobró.
- 2 zanahorias
- Tres dientes de ajo
- Una cebolla mediana tirando a grande
- 2 ramas de apio
- 5 tomates (muy) maduros. En mi caso usé tomates ecológicos del huerto de mi frutero de confianza.
- 1 kilo de tomate en bote. Mi frutero de confianza me vendió tomate casero embotado por él mismo; en la receta original, Oliver propone usar dos botes de tomate de 400 gramos cada uno. Personalmente, prefiero ir a lo casero siempre que se pueda.
- Dos pastillas de caldo de pollo
- Litro y medio de agua
- Albahaca
- Sal
- Pimienta molida.
Como veis, la cantidad de ingredientes varía ligeramente de la receta de Oliver a mi versión. Por desgracia, no pude conseguir hojas de albahaca frescas y me tuve que conformar con las especias deshidratadas… En lo que respecta al tomate, mi versión sale ganando al sustituir las dos latas por el tomate casero.
La preparación varía poco, ya que seguí casi a rajatabla las instrucciones de la receta original: trocear / laminar las zanahorias, cebolla, ajo y apio; pochar en aceite, a fuego medio, en una cacerola grande o en una olla (yo usé la olla) durante unos 15 minutos o hasta que las verduras estén tiernas pero sin perder la forma; añadir los tomates (tanto los enteros como los de bote) y el caldo de pollo disuelto en agua; llevar al punto de ebullición y, cuando esté hirviendo, bajar a fuego medio/bajo, tapar con una tapadera (no la de la olla, ¡no queremos que explote!) y dejar 10 minutos.
Cuando hayan transcurrido esos diez minutos, pasamos la batidora hasta que quede todo lo mejor triturado posible (no pasa nada porque haya algún pellejo del tomate, o pepitas…) y añadimos la albahaca, sal y pimienta al gusto. Removemos y ¡a servir!
Yo la hice de un día para otro y seguí el consejo de Oliver de volver a sazonar la sopa al servir. Un poco más de sal y pimienta en cada tazón fue el toque maestro.
El resultado fue espectacular, la verdad. Una sopa de tomate exquisita, nutritiva y con muchas propiedades antioxidantes, con un sabor netamente británico que me hizo regresar por un momento a los parajes de Escocia donde la probé por primera vez. Repetiré sin duda.
Para terminar el post y como ejercicio de inglés, puede ser una buena idea que cojáis la receta de sopa de tomate original de Jamie Oliver y la comparéis con la mía, buscando los términos de vocabulario que he incluído yo aquí, así como aquellos que no entendáis a simple vista o por el contexto.
Si alguien se anima a hacer la receta, ya me diréis qué os ha parecido.
Yummy yummy!!! Me encanta la sopa de tomate… Y en general todas las sopas, que soy muy de cuchara! Y es cierto que aquí se les dan genial! Por eso para mí, una apuesta segura (casi, que algunos sitios para espesar la sopa le echan beans y entonces se la comen ellos.,) para el lunch es la sopa del día, de lo que sea que se les ocurra: broccoli y Stilton, verduras variadas, puerro con patata… La de ayer, sin ir más lejos: calabaza y cangrejo: deliciosa!!
Calabaza y cangrejo, suena muy bien. Exótica. Pues te recomiendo que intentes hacer esta receta en casa. Es super sencilla y sabe a gloria. Y sí, muy fan de las soups of the day. Les salen realmente bien 🙂
Pero qué receta intento? La tuya o la de Jamie? 😉
La mía, claro :p
La he hecho varias veces. Mi hija odia el tomate y cuando estuvimos en Londres la probó creyéndose que era de calabaza (por el color) y le encantó. No se podía creer que fuera de tomate.Cuando encontré tu receta y la probamos parecia que estuviéramos allí. Esta buenísima. Enhorabuena
Caramba, ¡¡¡muchas gracias!!!
Me alegro un montón de que os haya gustado; y es que, como habrás podido observar, mi blog no es de cocina precisamente. Aunque a mí me gusta cocinar y, ¿qué hay más British que la sopa de tomate? Jejeje.
Me alegro mucho de que os haya gustado la receta, en serio (aunque la original es del genial Jaime oliver, la mía es una versión, jaja).