Bienvenidos un miércoles más a Yentelman, el blog en el que aprenderéis inglés y, si os descuidáis, hasta español. Si sois lectores habituales del blog, habréis notado que he estado de vacaciones durante unas semanas (con una entrada publicada entre mis dos periodos vacacionales). Pues bien, ya he vuelto; y para que la rentrée no sea demasiado dura vamos a entrar en calor con una entrada ligera y (relativamente) breve, de esas en las que os enseño a diferenciar entre términos con los que soléis liaros: hoy, en la sección de confusing words, las diferencias entre las preposiciones in e into, explicadas de forma lo más sencilla posible 🙂
Para empezar, tan sólo recordaros que ya hemos hablado largo y tendido de in (tanto en su uso como preposición de tiempo como de lugar, además de menciones varias en muchas otras entradas). Por lo tanto, no me voy a extender más en analizar los usos particulares de dicha preposición, sino que voy a ir directo al grano: en general, la principal diferencia de uso entre in e into es que la primera se puede considerar de «posición», mientras que la segunda es más bien de «dirección».
Y dicho esto, paso a explicar de qué rayos estoy hablando.
Si revisáis la entrada enlazada arriba en la que hablo de in como preposición de lugar veréis que, tanto esta como las demás preposiciones del post (in, on y at) aparecen tratadas como preposiciones estáticas, es decir, que hacen referencia a items que, simplemente, «están» en un sitio. Por el contrario, preposiciones como to, towards, from… se considerarían preposiciones «de movimiento», ya que hacen referencia a un desplazamiento del item en cuestión. La preposición into entraría en este último grupo, el de preposiciones de movimiento o dirección, y esa es, como ya hemos dicho, la principal diferencia de uso con in.
Sin embargo, los más observadores se habrán dado cuenta de que into es, en realidad, una palabra compuesta, algo bastante frecuente en inglés, por otra parte. Y para añadir más confusión al asunto, resulta que las palabras que forman into son nada más y nada menos que otras dos preposiciones: la ya mencionada in, que ya hemos dicho que es «estática», y to, que es probablemente la más utilizada preposición «de movimiento».
«¿Pero qué me estás contando, señor Yentelman? ¿Es esto posible?». Tranquilos, pequeños padawans, que ya sabéis cómo se las gasta el inglés. Sí, es posible. Y mucho más sencillo de lo que pensáis: into se utiliza para indicar dirección hacia el interior de un lugar, de ahí la combinación de la preposición in, en su más clásica acepción de diccionario («dentro de»), con la preposición de movimiento to. Veamos un ejemplo sencillo:
The burglar broke into the house. (El ladrón irrumpió en la casa).
En este caso debemos tener claro que la acción del ladrón implica «movimiento hacia dentro» de la casa. A la hora de decidirnos por una u otra preposición es importante observar también el verbo que las acompaña: si estamos ante un verbo de movimiento como go, come, run o el break del ejemplo, lo lógico es que debamos emplear una preposición de dirección. Por el contrario, si el verbo es estático (el verbo to be, por poner el ejemplo más frecuente), es de esperar que la preposición, en general, también lo sea. (Ojo: no es extraño ver un verbo como come o go acompañado de una preposición in. La clave está en si se menciona el lugar a donde se dirige el sujeto. Si no es así, come in o go in son opciones correctas).
Por lo demás, la preposición into puede utilizarse también para referirse a una afición (I’m really into Dinosaur Erotica – Me gusta mucho la literatura erótica con dinosaurios) o para indicar cambio (…and the worm turned into a beautiful butterfly – …y el gusano se convirtió en una preciosa mariposa); y hay que tener cuidado de no confundirla con la suma de sus partes por separado: in to (The police came in to arrest the burglar – La policía entró para arrestar al ladrón). Si estas dos aparecen juntas pero sin formar una única palabra, seguramente sea porque una de las dos NO será preposición; y creedme, es más habitual de lo que pensáis: tanto in como to son, además de preposiciones, adverbios; nuestra querida in puede ser además un sustantivo o un adjetivo. En cuanto a to, tal vez le recuerden por sus apariciones junto a un verbo para formar el infinitivo.
Si queréis ver más ejemplos de into como preposición de lugar, en el enlace siguiente podéis encontrar una buena cantidad de chistes en inglés de los conocidos como «walk into a bar«, para que se vea que los españoles no tenemos la exclusiva con nuestros chistes malos del inglés el francés y el español.
2 thoughts on “Confusing words: preposiciones in vs. into”