Bienvenidos a una nueva entrada de Yentelman, el blog en el que aprenderéis inglés y, si os descuidáis, hasta español. Con la llegada del verano y de mi nuevo horario de ídem, jornada continua hasta las 3 con la tarde libre (salvo por un día que me zampo 12 horas del tirón, pero bueno… beggars can’t be choosers) he aprovechado para retomar las clases de pilates en el gym de debajo de mi casa. Cinco años hacía que no iba a pilates, cinco, y entre eso y que obviamente soy cinco años más viejo que esa última vez, pues bueno… os podéis imaginar el panorama.